En la jornada del sábado, convocamos a más de 300 peregrinos y asociaciones de toda España para un desfile por las calles de Potes y al monasterio de Santo Toribio
El 14 de abril se cerraba la Puerta del Perdón del monasterio de Santo Toribio de Liébana, que no volverá a abrirse hasta 2028.
El día anterior, se organizan en Liébana actos para despedir esta efemérides.
Nuestra asociación fue una de las colaboradoras en esta celebración, y nos ocupamos de convocar a más de 300 peregrinos, en su mayor parte de Camargo, donde tenemos nuestra sede, y de Piélagos, gracias a la convocatoria del Grupo de Montaña Carceña.
También hicimos llegar la invitación a las asociaciones de amigos del Camino de Santiago de toda España, y más de 50 quisieron estar presentes o representadas luciendo sus estandartes en la marcha. La Federación Española de Asociaciones de Amigos del Camino de Santiago estuvo también representada por su presidente, Jorge Martínez Cava.
Pudimos saludar a amigos de asociaciones venidos de Zaragoza, de León, de Madrid, de Santurtzi, de la Vía Aquitania, además de otros de Cantabria, representando a Santullán, Güemes, la Hermandad de Caballeros Defensores del Lignum Crucis, etc.
La Fundación Camino Lebaniego había programado un pasacalles que abrían los «arrastrasillas«, seguidos de un nutrido grupo de nuestros peregrinos que continuarían su marcha hasta el monasterio. Detrás iban grupos de música y danzas de Cantabria, que alegraban las calles de Potes con su música y sus bailes. Les seguían las peñas gastronómicas de Cantabria, ataviados con sus uniformes de gala: respigos de Laredo, nécoras de Noja, sobaos, limones de Novales, hojaldres, anchoas, etc.
El grueso de los peregrinos cerrábamos el desfile, luciendo los estandartes de las asociaciones de amigos del Camino de Santiago. Por las calles de Potes, el pasacalles fue muy animado.
En la plaza de Jesús de Monasterio se finalizó la marcha. Algunos estandartes rodearon la tribuna de oradores, y el resto lucían en la plaza.
Mientras los grupos folclóricos bailaban en la plaza, y las peñas gastronómicas preparaban sus deliciosas degustaciones, los peregrinos subían esforzadamente las rampas hacia el monasterio, en un día de sol radiante y mucho calor:
Enhorabuena merecida por su esfuerzo a quienes subieron al monasterio, sobre todo a los miembros del Grupo de Montaña Carceña y sus guías.
Una vez acabada la Misa del Peregrino, nos reunimos todos en Potes, donde las peñas gastronómicas nos deleitaron con sus bebidas y deliciosas especialidades.
Los estandartes han quedado expuestos en el Centro de Estudios Lebaniegos.
Fue una jornada estupenda, y hay que agradecérselo a quienes lo hicieron posible:
A la organización de la Fundación Camino Lebaniego.
A las cofradías gastronómicas por sus deferencias con nosotros.
A los amigos venidos de otras regiones, que hicieron el esfuerzo de viajar desde lejos para estar con nosotros.
A quienes nos acompañaron en esta fiesta desde Camargo y Renedo, que desafiaron al calor y dieron muestras de su espíritu de celebración.
A nuestros voluntarios, por su generoso esfuerzo para que todo saliera bien.
No están todos los que son, pero son todos los que están
Y queremos agradecer especialmente al Ayuntamiento de Camargo la ayuda que nos prestaron para que los camargueses animaran la fiesta con su presencia.
Y ahora, a trabajar, para que el próximo Año Jubilar Lebaniego, en 2028, sea aun mejor; para que en este tiempo que ahora se abre seamos capaces de mejorar la hospitalidad de cuantos peregrinos se esfuercen en llegar hasta Cantabria y transitar nuestros Caminos.